Los trabajadores del plan municipal “Calles Seguras” se manifestaron en calle 4 de Enero y Salta reclamando el pago y mejoras salariales por la labor que realizan.
Los “trapitos” que se reconvirtieron en trabajadores municipales bajo el programa “Calles Seguras” solicitan que el municipio deposito el salario correspondiente al trabajo realizado por jefes de familia que anteriormente trabajaban como limpiavidrios.
Desde la manifestación, dicen que alrededor de 80 familias están afectadas por la situación del pago irregular. Desde que se sumaron al programa “Calles Seguras” denuncian que están trabajando “a la deriva” y que tienen que usar las herramientas laborales que llevan desde su casa: “Estamos sin ropa, sin calzado y tenemos que usar lo nuestro”, se quejaron.
Sobre la situación económica dijeron que les pagan $4500 por mes por un trabajo de siete horas diarias -de 7.30 a 14-. “Una familia no puede vivir con eso, no llegamos ni a a una semana y algunos tenemos que pagar alquiler”, sentenciaron.