Durante muchos años se lo calificó al huevo como un alimento crítico y hasta“malo” para la salud, especialmente para el sistema cardiovascular, creyéndose que producía el aumento de colesterol en sangre. Sin embargo, en los últimos años, gracias a los avances científicos en materia de nutrición, se pudo desmitificar estos supuestos efectos dañinos, demostrándose, incluso, los aportes y beneficios de este alimento de consumo tan habitual.
Debemos saber que el aumento del colesterol en sangre relacionado con la alimentación se da por el consumo excesivo de grasas saturadas y no por el colesterol contenido en los alimentos. Es decir, es importante reducir o controlar la ingesta de alimentos grasos como embutidos, manteca, cortes de carnes grasos, lácteos enteros, frituras. Sin embargo, el huevo, no es un alimento fuente de grasas saturadas, por lo cual no implica un riesgo para la salud cardiovascular.
Además, el colesterol en sangre se ve afectado por varios factores de riesgo, como ser una dieta que, además de ser rica en grasas saturadas y trans, sea pobre en fibras (frutas, verduras y cereales integrales) y grasas buenas (aceites crudos, palta, semillas, pescados), el sedentarismo, la ingesta de alcohol, el estrés, e, incluso, algunos medicamentos.
Retomando el tema del consumo de huevo, lejos de “demonizarlo”, debemos resaltar sus aportes nutricionales:
- Un huevo entero aporta sólo 75 calorías
- La proteína del huevo se considera la de más alto valor biológico o completa (porque contiene los 9 aminoácidos esenciales para el organismo).
- Las grasas que predominan en el huevo son mono y poliinsaturadas (principalmente ácido oleico u omega 9), muy beneficiosas para el organismo. Su grasa es de fácil digestión. También están presentes la lecitina y los fosfolípidos.
- Minerales: aporta hierro (aunque de difícil absorción), concentrado especialmente en la yema); selenio, yodo, fósforo, zinc, potasio y magnesio.
- Vitaminas: es una gran fuente de vitamina B12 (cobalamina), concentrada principalmente en la yema, B2 (riboflavina) y B7(biotina). Aporta vitamina B1 (tiamina), niacina (vitamina B3), ácido fólico, vitaminas A, D y E (en la yema). Posee colina, muy conveniente para la alimentación de mujeres embarazadas, ya que facilita el correcto desarrollo del sistema nervioso central del embrión, junto con el ácido fólico. Sus carotenoides, ayudan a disminuir el riesgo de padecer trastornos oculares como las cataratas y la ceguera.
- No aporta hidratos de carbono.
El consumo de huevo es conveniente en todas las etapas de la vida ya que es un alimento que nutre al niño, fortalece al adolescente, alimenta al adulto y favorece al anciano gracias a su inigualable aporte de nutrientes. La recomendación es de 1 unidad por día, ya sea hervido, poche, omellete, a la plancha, en preparaciones como soufflé, budines, tartas, tortillas, etc. Cabe destacar que, si lo consumimos frito, puede resultar perjudicial para la salud.
Lic. Romina Krauss-Nutricionista
M.P. n° 147