Se trataba de un magnate belga de origen israelí, que sufrió un paro cardíaco durante la intervención.
Un magnate belgra de origen israelí era dueño de todo el dinero al que se podía aspirar. Pero pese a tanta abundancia, tenía una carencia: su pene era chico. Por eso, decidió someterse a un cirugía de estiramiento que terminó mal, ya que sufrió un paro cardíaco y murió en el quirófano. A los 65 años, Ehud Arye Laniado, a quien llamaban “El Argentino” por cómo bailaba tango, se sometió a una operación para alargar su miembro.
Lo hizo en París, en una clínica ubicada en la céntrica avenida Champs-Élysées. Cuando los profesionales comenzaron el procedimiento, algo falló y el magnate sufrió un paro cardíaco luego de que “le inyectaran una sustancia en su pene” y no pudo ser reanimado.