La película que cierra los primeros diez años de Marvel Studios, lo hace de manera impecable y con un repaso por toda la rica historia de estos personajes
Y finalmente, después de 365 días de cruel espera, llega a los cines Avengers – Endgame, quizás la película más esperada de la década, sobre la que mucho se ha hablado, más se ha escrito, y especulado a más no poder.
Y hay que decirlo: la espera ha valido la pena, no sólo porque los directores Anthony y Joe Russo han estado a la altura de las circunstancias en cuanto a las expectativas de los fans, sino porque también se las han arreglado para llegar al estreno con la mayoría de los secretos del guión a salvo (algo casi imposible en los tiempos que corren) y con una colección de viñetas memorables en fílmico.
La película comienza algunos días después del final de Avengers Infinity War, cuando el villano Thanos chasqueó los dedos tras obtener las seis “gemas del infinito” y logró su objetivo de eliminar al 50 por ciento de la población del universo. Por cuestiones técnicas, los Avengers logran dar con el villano y empieza una batalla que concluirá… ¡cinco años más tarde!
Sí, la acción da un salto en el tiempo, y muestra nuevas versiones de estos queridos personajes, todavía en busca de una solución al drama que los acongoja, pues muchos de ellos han perdido seres amados en un abrir y cerrar de ojos.