El hongo Candida auris integra el grupo de las infecciones intrahospitalarias y emerge cada vez más resistente entre pacientes con el sistema inmunológico debilitado y ante las terapias antibióticas más corrientes. En la Argentina, hasta hoy no existe conocimiento de ningún caso identificado de infección por Candida auris. La opinión a Infobae de expertos infectólogos
No es que el hongo Candida auris sea tan misterioso como plantearon las primeras crónicas periodísticas ante su aparición virulenta en varios países del mundo, sino que – si es que cabe la elección de un adjetivo para describirlo- tal vez el correcto sea “resistente”, ya que demostró hasta hoy un alto poder de supervivencia. Ahora vayamos a desentrañarlo y al por qué.
Este hongo -Candida auris- integra el “paquete” de las llamadas infecciones intrahospitalarias y tiene un alto poder de resistencia a las terapias antibióticas más corrientes que se usan para repeler una infección entre los confines de una institución de salud. Se suma al diagnóstico sobre el “teatro de operaciones” de este hongo, la dificultad de su detección temprana, provocando cuando se ofrece un tratamiento que presente una resistencia innata a las varias drogas antibióticas que se utilizan habitualmente.
Este hongo produce enfermedades severas e invasivas que afectan la sangre, el corazón y el cerebro con una alta mortalidad. Los países que hasta el 2019 reportaron infección por Candida auris son Estados Unidos, Canadá, Venezuela, Reino Unido, Alemania, Francia, España, Pakistán, Japón, India, y varios países del continente africano, entre ellos Sudáfrica.
El hongo candida auris también tiene algunas especificidades propias. Su alto poder de superviviencia a los antibióticos de “primera elección” lo hace emerger más habitualmente en servicios hospitalarios, como los de neonatología y cuidados intensivos.
En la Argentina, según consignó hasta hoy la autoridad en materia sanitaria, la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (ANLIS) “Dr. Carlos Malbrán”, en la Argentina no existe conocimiento de ningún caso de infección por Candida auris .
Según el paper de ANLIS- Malbrán, el hongo -emergente- Candida auris fue descubierto en Japón en el año 2009 por una infección en el oído de una mujer sana. Es multiresistente a la mayoría de las drogas antifúngicas comúnmente utilizadas para tratar las infecciones por Candida.
De difícil identificación por los métodos estándares de laboratorio, se requiere de técnicas especiales para su identificación, que no están presentes en todos los laboratorios.
La trasmisión es a través de las manos del personal de salud y del entorno que rodea al paciente (habitación, cama, mesitas de luz, aparatología médica para realizar estudios, entre otros). Por eso la importancia de la higiene de manos con alcohol y de la adecuada limpieza en el ámbito hospitalario.
En diálogo con Infobae el médico infectólogo Pablo Scapellato y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) se esmeró en precisar conceptos sobre el hongo Candida auris ante la amplificación de la noticia en la Argentina y en el mundo. “Lo primero importante es no confundir este hongo con un virus. Este hongo no es distinto a cualquier infección nosocomial o conocida más popularmente como infección intrahospitalaria, es decir contraída por pacientes ingresados en un recinto de atención a la salud (hospitales y otros tipos)”.
¿Cuáles son los problemas específicos de este hongo? se preguntó Scapellato, “emerge resistente y como resultante del uso de antimicrobianos y antifúngicos para tratar a los pacientes”.