Efectuaron más de 80 disparos contra un auto. Mataron al padre y provocaron heridas a otras dos personas. Alegaron “legítima defensa” pero con el correr de las horas se derrumbó su versión.
Diez soldados del Ejército brasileño fueron detenidos este lunes luego de abrir fuego contra un vehículo en el que viajaba una familia hacia un cumpleaños infantil en la ciudad de Río de Janeiro.
De acuerdo con los peritos, los efectivos realizaron más de 80 disparos y mataron al padre de familia, Evaldo dos Santos Rosa, un músico de 51 años que manejaba el auto en el que también se encontraban su esposa, su suegro, su hijo de 7 años y otra niña de 13. El suegro de la víctima fatal y un transeúnte resultaron heridos.
En un primer momento el Ejército había informado que los soldados dispararon en respuesta a un supuesto ataque, pero las autoridades encontraron más tarde inconsistencias en las declaraciones de los involucrados y tomaron la decisión de detenerlos, suspenderlos y someterlos a un proceso en la justicia militar.
“En virtud de inconsistencias identificadas entre los hechos inicialmente reportados y otras informaciones que llegaron posteriormente al Comando Militar del Este, se determinó la suspensión inmediata de los militares involucrados que fueron enviados a la Comisaría de Policía Judicial Militar para la toma de testimonios individualizados”, informó un comunicado del Ejército.
“Todo indica que los militares realmente confundieron el auto con un vehículo de bandidos. Pero en este vehículo estaba una familia. No fue encontrada ningún arma. Todo determinó que se trataba de una familia normal, de bien, que acabó siendo víctima de los militares. No veo indicios de legítima defensa, por la cantidad de tiros”, dijo a su vez el comisario de Policía Civil Leonardo Salgado.
El Ejército asumió el control de la seguridad pública en Río de Janeiro en febrero de 2018 ante la ola de violencia que sacude a la ciudad, donde las estadísticas oficiales cuentan unos 6 mil muertos al año por esta causa.
La proporción del uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad en Brasil es un tema de discusión y son múltiples los casos de denuncias de gatillo fácil.
La semana pasada, por caso, la policía mató a once presuntos ladrones de bancos a las afueras de San Pablo, en una operación en la que no se reportaron agentes de seguridad con heridas.