La Terminal de Omnibus Mariano Moreno muestra una cara más de la crisis económica en el transporte. En menos de una década, la cantidad de micros que entran y salen de la estación de colectivos de larga distancia descendió un 43 por ciento. Un porcentaje que encendió todas las alarmas.
A modo de ejemplo, se destaca un cambio de hábitos de consumo: los estudiantes universitarios dejaron de viajar los fines de semana a sus hogares.
“En el año 2010 estábamos en 1.200 colectivos por día que entraban y salían de la Terminal. En este momento estamos en 516 coches”, comparó el titular del ente que administra la estación, Orlando Debiassi, para explicar que en menos de una década la retracción en la actividad fue del 43 por ciento.