Se trata de un cuidacoches que ya estuvo arrestado por esta causa y quedó demorado este lunes tras declarar por segunda vez.
La justicia de Uruguay podría procesar este martes al único detenido por el crimen de Lola Chomnalez, la chica de 14 años que fue asesinada en Barra de Valizas, Rocha, en diciembre de 2014.
ngel “El Cachila” Moreira Marín, de 33 años, vive en Valizas y trabaja como cuidacoches. En su momento fue arrestado en el marco de la causa y lo liberaron por falta de pruebas, pero está demorado de nuevo tras prestar declaración por segunda vez.
“Se trató de una indagatoria en la que también participó una perito semióloga. Entre otras cosas, la perito logró determinar que el sospechoso, cuando hablaba de cosas que no le generaban preocupación tenia un lenguaje no verbal cómodo y cuando se le preguntaron cosas relativas al homicidio tenia gestos restrictivos“, explicó el fiscal de la causa, Jorge Vaz.
“No puedo determinar si fue el homicida, aunque tengo la plena convicción de que el estuvo en el lugar”, sentenció Vaz, quien acusó a Moreira como co autor del crimen. Falta determinar quién fue el otro agresor, dado que se confirmó que la chica fue atacada por más de una persona.
“Los padres estaban esperando conocer la verdad y este es un hito transcendente en el expediente. Con esta medida creemos que la investigación empieza a arrojar un poco de luz y de paz”, expresó uno de los abogados de la familia, Juan Williman.
Lola había viajado a Barra de Valizas el sábado 27 de diciembre de 2014 para quedarse en la casa de su madrina, Claudia Fernández, quien estaba con su marido, Hernán Tuzinkevcih, y el hijo de él (de 14 años).
El 28 de diciembre, Lola salió a caminar por la playa y desapareció. Dos días después encontraron su cuerpo a cuatro kilómetros de la casa, en una zona de médanos, y se comprobó que murió por asfixia por sofocación, y que su cuerpo presentaba varios cortes hechos con un arma blanca.
La policía encontró la mochila de Lola en la playa de Valizas recién el 14 de enero de 2015, cosa que despertó duas en su familia hasta el día de hoy.
Los peritos pudieron analizar un toallón playero manchado con sangre que encontraron adentro del mochila de la adolescente y en adelante se comparó ese material genético con el de todos los detenidos que tuvo la causa, pero como todos dieron negativo fueron liberados, incluido el cuidacoches.
De ahí la importancia de la declaración del lunes de Moreira, que fue requerida tras la de otro testigo convocado por el juez Juan Manuel Giménez Vera.
“Siento que empezamos a estar cerca de conocer la verdad“, expresó la madre de Lola, Adriana Belmonte, al sitio Clarín.
Moreira enfrenta cargos por “homicidio muy especialmente agravado en calidad de co-autor”.