Una acalorada discusión tuvo lugar en la sala de informes de la unidad de terapia intensiva del nosocomio local. La seguridad del hospital tuvo que intervenir para calmar ánimos.
El día martes al momento de brindar informes de pacientes internados en la Unidad de Terapia Intensiva del hospital Cullen, dos familiares de una mujer internada discutieron de manera agresiva y también intercambiaron golpes para dirimir quién recibiría el parte de salud de su hija. Se trata del padre y la madre de la paciente, que están divorciados.
La discusión surgió porque la coordinadora que pasa los parte de salud a las 20 familias que tienen pacientes en la unidad solo lo hace para un familiar por interno. Dicha medida fue adoptada ante la presencia de gran cantidad de gente (que no siempre son familiares directos) y se informó que la actualización de salud solo sería para los familiares.
Ante la voracidad de la discusión entre padre y madre el personal de seguridad que trabaja en el hospital Cullen tuvo que intervenir y separarlos. Además, desde la dirección del hospital Cullen decidieron que, para evitar problemas, el informe sea para el padre, la madre y la pareja de la paciente.
La interna en cuestión es una joven de 26 años que ingresó al hospital el 11 de mayo con un escopetazo en el lateral del tórax.
