El empresario periodístico tenía 86 años. Empezó como canillita y fotógrafo, pero el primer éxito de su carrera fue con la creación de la revista “Así es Boca”. También incursionó en el espectáculo como un importante productor teatral.
Las famosas placas rojas de Crónica TV debieron informar en la mañana de este sábado la muerte de su creador, el periodista Héctor Ricardo García, a sus 86 años. Personalidad trascendente de los medios de comunicación desde que en 1954 creó la revista Así es Boca, fue el fundador del Diario Crónica -en abril de 1963, teniendo apenas 31 años-, que llegó a tener tres ediciones diarias, un hito jamás alcanzando.
Pero también dejó su huella en el éter cuando adquirió Radio Colonia, en Uruguay, y sobre todo en la televisión, desde la clásica señal de noticias. Al aire desde 1994, Crónica TV fue la primera en transmitir las 24 horas, y todavía hoy exhibe el estilo sensacionalista y popular que caracterizó al Gallego, como todos los conocían.
Obsesivo del trabajo, hombre de gran carácter y cierta terquedad, pero a su vez fanático del Ratón Mickey (el personaje de Disney nació en su mismo día, el 18 de noviembre de 1932) y amante de los animales, entre los productos que surgieron de su ingenio e iniciativa se destacan también la revista Así (1955) y la Editorial Sarmiento (1965), de la que surgieron los semanarios Ahora y Flash.
De la escuela de Ricardo García surgieron figuras como Víctor Hugo Morales (empezó a relatar fútbol en Radio Colonia), Jorge Rial y Luis Ventura, entre muchos otros. Porque este empresario que a lo largo de su vida concedió muy pocas entrevistas, entendiendo que él no era ni personaje ni protagonista (aunque más bien, siendo preso de su timidez), también estuvo muy vinculado con el espectáculo. La Pavada, la sección publicada en la contratapa de Crónica, escribía él mismo los chimentos más jugosos.
Además, en 1972 el Gallego compró el Cine Astor, que convirtió en el Teatro Astros, uno de los más importantes de la Calle Corrientes. Y en Mar del Plata administró El Tronador, llevando a la temporada veraniega una gran cantidad de espectáculos. De ese modo llegó a tener su propio multimedios, siendo titular de radios, revistas, diarios, un canal de televisión y varios teatros. Y en algún momento, hasta de un circo.
En marzo de 1973 fue secuestrado por una fracción del Ejército Revolucionario del Pueblo; lo liberaron cuando aceptó publicar en Crónica un comunicado de la organización. Tres años después, ya durante la Dictadura (junio de 1976), estuvo prófugo durante tres semanas luego de un allanamiento a la redacción del diario, motivada por la publicación de la muerte de Mario Santucho, líder del ERP. No fue la primera ni la única vez que intentaron censurarlo. Por caso, estuvo cerrado durante un año por orden de José López Rega, simplemente por haber promovido una campaña a favor de las Islas Malvinas. También sufrió atentados en sus teatros.
Pese a escatimar sus palabras públicamente, en 2012 Ricardo García publicó su autobiografía, La culpa la tuve yo. Ese mismo año fue absuelto en un juicio por evasión impositiva, en cuyo proceso de investigación se le había dictado una prisión domiciliaria (2005). En 2016, García se retiró definitivamente de Crónica TV, desprendiéndose de la totalidad de las acciones.