La iniciativa la lanzo el Reino Unido, precisamente por ser uno de los paises favoritos de los espias ciberneticos. El formato permite ser utilizado sin necesidad de introducirlas a los cajeros automaticos. La propuesta es similar a la SUBE.
La tecnología avanza a pasos agigantados y presenta una nueva batalla entre las grandes empresas que invierten grandes sumas de dinero para poder contraatacar los embates de los hackers que intentan robarles bases de datos para transformarlas en actividades delictivas con el objetivo de ganar dinero.
En ese sentido, Inglaterra es el primer país del mundo que puso en práctica un sistema de tarjetas de débito que utiliza la huella dactilar en lugar de los códigos pin para pagar.
Si bien por el momento es un programa piloto, hay más de 200 clientes que ya cuentan con este sistema que está en período de prueba y promete ser una revolución en materia de tecnología biométrica, ya que detecta en menos de un segundo la identidad del propietario antes de consumar el pago a realizar.
El Reino Unido es una de las regiones más castigadas del mundo por los delitos cibernéticos y eso hace que siempre se estén buscando alternativas para frenar la fuga de millones de dólares habituales a causa de los robos de identidad e información.
Muchos bancos han sido un blanco para los delincuentes durante 2017 y 2018 y, mediante complejas operaciones tecnológicas, han logrado imprimir diferentes tarjetas para hacer extracciones de dinero en los cajeros automáticos de distintos puntos del mundo, llevando a importantes números de pérdida de dinero para diversas compañías.
Además del sistema de reconocimiento dactilar, las tarjetas de débito tienen una tecnología conocida como contactless, sin contacto en inglés, que es la misma metodología que se usa para las tarjetas del programa SUBE que se utiliza en los medios de transporte.
De este modo, las transacciones comerciales se realizan sin necesidad de introducir las tarjetas en las terminales electrónicas, sino que sólo ante el contacto se hace la compra.
La compañía encargada del desarrollo del sistema es conocida como Gemalto, y su portavoz Howard Berg comenta que “utilizar la huella dactilar en lugar de un código pin para autorizar transacciones tiene muchas ventajas, pero principalmente, nos estamos enfocando en la seguridad de los datos ya que el sistema de contactless permite que algunas personas puedan robar datos con una máquina que haga contacto, pero la huella dactilar agrega una dificultad muy grande para los hackers”.
Finalmente destacó el portavoz que “Todas las transacciones que sean mayores a 40 dólares deben ser validadas por la huella dactilar en la terminal de compra”, para evitar todo posible intento de fraude o imitación.