El cuerpo de la referente de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) tembló visiblemente, aunque con menor intensidad que en otras ocasiones, durante una ceremonia con honores militares junto al primer ministro de Finlandia, Antti Rinne, en el exterior de la cancillería, en Berlín.
El incidente se produce tras otros similares ocurridos el 18 y el 27 de junio, y en ambos casos la dirigente, de 64 años, se recuperó rápidamente al comenzar a caminar.
Durante la cumbre del G20 en Japón el pasado 29 de junio, Merkel dijo que entiende las dudas sobre su estado de salud pero insistió en que “estaba bien”.