El presidente de la Federación Argentina de Expendedores de Nafta del Interior (Faeni), Alberto Boz, dijo que la nafta en la Argentina ya está a valores internacionales y que salvo un fuerte repunte del dólar o del barril de crudo no debería haber aumentos en los surtidores. Además, aún se está lejos de establecer un sistema de autoservicio en las estaciones que permitiría establecer una tarifa diferencial más barata.
“Hoy ya estamos en el precio internacional”, aseguró Boz y agregó: “Hubo momentos donde bajaba el crudo, bajaba el dólar, pero aún había retrasos en el precio. Si no hay una escapada abrupta del dólar o un aumento muy grande en el barril de crudo, que sabemos que tiene su volatilidad en función de la inestabilidad en Medio Oriente, hoy con la estabilidad del tipo de cambio en la Argentina no deberíamos tener aumento más que el de la carga impositiva que es trimestral”.
“Eso aumentó el mes pasado. El incremento iba a ser del 1,2% pero el gobierno lo desdobló y por eso vamos a tener un 0,6% en los primeros días del mes que viene. Esta fue una buena medida del gobierno, la de ajustarla por inflación. El año pasado la inflación fue de más del 40% pero el combustible casi aumentó el 80%. El haber hecho que la carga impositiva aumente de acuerdo a la inflación redundó en un beneficio al consumidor de casi un 50% de la carga impositiva”, argumentó.
Luego, el estacionero santafesino dijo que se lograron avances en el cobro de las ventas por tarjetas de crédito. Al respecto señaló: “No logramos lo que queríamos que era llevar el pago con tarjeta de crédito a las condiciones que tienen países similares al nuestro como Colombia, Chile y Uruguay. En la Argentina se nos acreditaba el pago a los 28 días. Ahora con la circular del Banco Central se nos paga a los 10 días de la compra. Eso ya nos dio un desahogo y casi todas las tarjetas están activas en las estaciones. Nadie obliga al estacionero a no utilizar las tarjetas de crédito, pero tuvimos que pelear para que bajen los días en los que se acreditaban los pagos a los estacioneros”.
El autoservicio de combustible
A diferencia de lo expresado por el gobierno nacional, Boz aclaró que la posibilidad de establecer un sistema de autoservicio para la carga de combustible “no fue un pedido hecho por la parte patronal”. En ese sentido, remarcó: “Lo que sí sucede es que venimos sosteniendo reuniones mensualmente con nuestra federación y las distintas provincias a través de sus cámaras y la Dirección Nacional de Comercio en un trabajo de una especie de multisectorial donde todos los sectores van planteando los extra costos que tienen en la actividad. Esto nació hace dos años y ahora ya vamos puliendo y vamos quedando por sector”.
“Allí se manejaron muchos temas como los fletes, las tasas que tenían algunas municipalidades sobre combustibles y en una de esas reuniones, pero del lado de la Secretaría de Comercio nacional el tema del autoservicio como tienen muchos países y como también hubo en la Argentina en algún momento. En Santa Fe mismo teníamos dos estaciones donde había autoservicio”, recordó.
“Lo que no había –continuó– era un servicio diferencial como se está planteando ahora. En Estados Unidos todas las estaciones son autoservicio y tienen el mismo precio. Uno coloca la tarjeta de crédito en el surtidor, coloca cuánto quiere o la deja puesta para el tanque lleno y cuando termina la operatoria se cobra lo que marca el surtidor”.
Además, justificó que se trata de “una medida para reducir costos”, pero que “surge de parte del gobierno”. En ese sentido relató: “Nosotros enumeramos los costos que teníamos y surgió esto, pero nunca tomamos desde la parte empresarial al empleado o al playero como una carga para nosotros porque es nuestra fuerza de venta y el primer contacto con el cliente y quien hace que uno pueda vender un poco más o algún otro producto extra. Pero no es idea del empresario reducir el personal”.
“Puede haber autoservicio y que no se reduzca el personal, puede haber algo intermedio. Si el gobierno dice que manteniendo la grilla tenemos una bonificación en las cargas patronales, puede ser una opción porque nunca fue una opción para la patronal reducir empleados, más con la situación del país hoy y la baja de ventas que estamos teniendo todos por la caída de la actividad económica general”, explicó.
“Ahora está en manos de la Sectetaría de Energía la idea de establecer una isla con un precio diferencial de autoservicio y otras islas atendidas por empleados. En Europa está esta modalidad, pero en todas las capturas y los pagos los hace el cliente. Hoy aquí no podemos hacerlo porque aquí las capturas de las tarjetas de débito o crédito o los códigos QR los hace el empleado. Pero también tenemos el problema que la captura de datos son un monopolio de dos empresas, Lapos y Posnet, que no dejan que los surtidores capten datos”, cuestionó.
Por último dijo: “Todavía estamos a mitad de camino. Por ahora son todos análisis. Pero hay algunos gremios provinciales que ya pusieron el grito en el cielo. Pero todavía estamos lejos de la viabilidad de que esto funcione. Hay muchas cosas que acomodar. Por ejemplo, hay que saber que estamos trabajando con sustancias peligrosas, inflamables y que hay que tener un cierto control y manipuleo”.