El presidente Mauricio Macri inauguró el viaducto San Martín, con cuestionamientos al kirchnerismo. “No queremos nunca más mentiras, estafas, corrupción, trampas ni atajos”, dijo el mandatario, en un acto en plena campaña. Justamente la presentación de obras públicas es uno de los ejes de la estrategia electoral del oficialismo, que apuesta a las mejoras en infraestructura como “caballo de batalla”, a un mes de las PASO de agosto.
“Hace décadas que la Argentina dejó de crecer como debía porque se llenó de barreras y de trabas, que no permiten progresar. En estos tres años y medio lo más importante que hemos hecho es encarar la primera barrera, que es la de las cosas y los valores sobre los cuales queremos vivir y las cosas que no queremos nunca más“, dijo el Presidente, acompañado por el jefe de Gobierno de la Ciudad Horacio Rodríguez Larreta, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal y el ministro de Transporte Guillermo Dietrich, entre otros.
Compromiso y crecimiento
El mandatario dijo que su gestión tiene “compromiso por el hacer” y que en estos tres años y medio se establecieron “las bases para proyectar un crecimiento mayor”. “Estar en política es para hacer el esfuerzo correcto para ayudar a otro argentino a poder desarrollarse”, afirmó. En este contexto dijo que los argentinos no quieren nunca más “mentiras, corrupción, atajos ni viveza criolla”.
En clave electoral, aprovechó el acto para destacar el trabajo conjunto entre Nación, Provincia y Ciudad. “Esto tiene que ver con haber hecho las bases, con una curva de aprendizaje, con una planificación en equipo y pensar a mediano y largo plazo”, dijo Macri.
Por otro lado, criticó el “aislamiento con el mundo” que se produjo en los gobiernos K y consideró que el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea “es una autopista de crecimiento”. Dijo que “la resignación no es algo que pueda aceptarse” y que los argentinos “se merecen vivir mejor de lo que han vivido” en años anteriores.