La baja del precio internacional del petróleo no llegó a los surtidores. El alza tiene que ver con la suba del impuesto a los combustibles líquidos.
Los precios de los combustibles aumentaron 16,5 por ciento, en promedio, en la provincia de Santa Fe durante 2019, según el último informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso). Pese a la baja del precio internacional del barril de petróleo y del tipo de cambio, el precio de los combustibles volvieron a subir, esta vez impulsados por el aumento en el impuesto a los combustibles líquidos.
En detalle, los aumentos en nafta fueron en promedio del 16 por ciento y el gasoil subió en promedio 17 por ciento. Entre las ciudades cabecera de los cinco departamentos de la provincia, Venado Tuerto tiene el mayor precio de naftas: el litro de Super cuesta en promedio $ 48,35 y Premium $54,60. También tiene el mayor precio promedio del gasoil común, ya que el litro cuesta $ 44,35 y el de premium $52,76. En la otra punta se encuentra Rosario, con los valores más bajos de la provincia.
Ceso advierte que continúa la caída en el consumo de naftas y destaca que las naftas Premium son las más golpeadas. Hace 9 meses que sus ventas caen más de 20 por ciento interanual. Esta baja no fue compensada por aumento en el consumo de nafta super. Por tal motivo, el consumo total presenta caídas interanuales superiores al 5 por ciento desde septiembre de 2018.
“La caída del consumo en Santa Fe en los primeros cinco meses de 2019 el consumo de naftas ha disminuido 7,5 por ciento interanual en la provincia de Santa Fe según datos de Ministerio de Energía. Mientras que el consumo de nafta super aumentó 1 por ciento, el de premium cayó 25 por ciento”, detallaron.
Por otra parte, se disparó el costo de transporte terrestre. Para recorrer 100 km un camionero debe hoy pagar 248 por ciento más que en diciembre de 2015 al cargar gasoil común, unos $1.093 adicionales.
Mientras que usar el auto pasa casi a ser un lujo, subraya Ceso. En Rosario llenar el tanque de un Bora con Nafta Premium cuesta $2.252 más que en diciembre de 2015. En tanto, en Rafaela mientras que un Peugeot llenaba el tanque de nafta Super en diciembre de 2015 con $878, llenarlo hoy cuesta $2.888 lo que representa un 229 por ciento adicional.
“Las principales petroleras del país han comenzado la segunda parte del año con nuevos aumentos en los combustibles. Anteriormente, los aumentos venían motorizados por la devaluación y el crecimiento del precio internacional del petróleo. En esta ocasión, con ambas variables disminuyendo, el aumento del impuesto a los combustibles líquidos sería el motivo del nuevo incremento de precios en surtidores”, reseña el informe de Ceso.
Desde inicios de 2018 el barril de petróleo Brent ha cotizado entre los u$s50 y 84 (línea roja). En el mismo período los combustibles han aumentado en promedio 95,5 por ciento. “Esto se debe a la fenomenal devaluación de peso que acumula un aumento del 129 por ciento y a la determinación de política energética del actuar Poder Ejecutivo Nacional de atar el precio en surtidores de combustibles a la cotización externa. Este aumento del costo de combustibles tracciona la inflación en los servicios de transporte y es trasladada a los bienes que deben ser transportados”, adviertió Ceso.
De esta forma la entidad que dirige el economista Andrés Isiain sostiene que “la política de dolarización del precio en surtidores brinda riesgo cero para las petroleras y es soportado por los usuarios, quienes reciben el impacto de los vaivenes del barril internacional y de las devaluaciones”.
Arriba y abajo. La venta de naftas cae desde hace 9 meses.