La reunión de Comité Ejecutivo no pudo celebrarse por falta de quorum, tras una nueva batalla por los promedios, y así podría no arrancar el campeonato en una semana.
El arranque de la próxima Superliga, pautado para el viernes 26 de julio, está en jaque. Ayer no se pudo llevar a cabo la reunión de Comité Ejecutivo y por eso no se aprobó el reglamento, algo necesario para que pueda comenzar el torneo.
El problema fue la falta de quorum porque 11 clubes decidieron no presentarse ante la imposibilidad de modificar el sistema de descensos. Su intención era que se implemente un sistema mixto: dos descensos con el tradicional sistema de promedios y otros dos por posiciones en la tabla anual, que también incluiría la Copa de la Superliga. Además, volvieron a pedir por la quita de puntos para San Lorenzo y Huracán, que quedó por el momento suspendida.
Los clubes que estaban para dar quorum eran 12 y se necesitaban al menos 13, la mitad más uno. Fueron: River, Boca, San Lorenzo, Racing, Independiente, Atlético Tucumán, Unión, Vélez, Huracán, Talleres de Córdoba, Godoy Cruz, Defensa y Justicia.
Los clubes que decidieron no asistir y están en pie de guerra fueron: Banfied, Colón, Patronato, Central Córdoba de Santiago del Estero, Arsenal, Argentinos, Rosario Central, Newells, Gimnasia, Estudiantes y Lanús. Mientras que Aldosivi estuvo ausente con aviso.
La batalla promete más capítulos y ya se baraja la chance de arrancar el campeonato nuevo con el reglamento viejo o que sea aprobado por la mesa directiva. Cuestiones del fútbol doméstico.