Una joven de 19 años recibió una descarga que le dejó una quemadura de segundo grado alrededor del cuello. La misma estaba recostada en su cama mientras su cargador estaba enchufado a la pared, pero no a su celular.
Uno de los extremos del cable (el que se engancha al teléfono) estaba detrás de la almohada sobre la cual estaba apoyada la mujer. La afectada sintió un fuerte dolor alrededor del cuello como si fuese una quemadura intensa.
Rápidamente partió al hospital para que la trataran ya que el dolor era severo. Allí le diagnosticaron una “quemadura parcial de segundo grado”. Los especialistas creen que la descarga se dio al entrar en contacto con un collar en cadena que tenía la mujer puesto y que le lograron quitar.
La doctora del caso hizo referencia a este tipo de hechos y lo común que se han vuelto. Dijo: “Lastimaduras por corrientes eléctricas se han vuelto muy común, generalmente a partir de elementos de bajo costo o pequeños elementos y se da mucho en niños y adolescentes”.
Ademas agregó: ”Incluso si el dispositivo es de bajo voltaje pero la corriente es alta, la descarga eléctrica podría ser grave. Los adolescentes y adolescentes corren un riesgo especial de sufrir lesiones debido a su uso frecuente de dispositivos móviles”.
Y concluyó: “Se les debe recomendar que no duerman con sus teléfonos o dispositivos móviles cargando en la cama y eviten dejar el cargador enchufado cuando no esté conectado a un teléfono”.