“El lunes empiezo” es muchas veces solo una expresión de deseo. En esta nota te damos algunas ideas alentadoras para que empieces de una vez .
Una dieta saludable previene las deficiencias nutricionales y protege contra las enfermedades infecciosas. Una buena dieta debe ser variada y rica en nutrientes que pueden mejorar las defensas del organismo.
Para que la comida sea saludable debe estar compuesta de proteínas, hidratos de carbono, grasas, fibra, vitaminas, calcio y otros minerales. Esto lo lográs variando los tipos de cereales, carnes, verduras y frutas que consumes, alternando los colores de la comida. Eso sí, todo con moderación, nada en exceso.
Comprobá estos 5 pasos para promover una alimentación saludable (en sucesivas notas te daremos más tips).
Elegí aquellos alimentos que te den variedad y te permitan cambiar la calidad de tu comida.
1) Agua en ayunas. Antes de tomar el desayuno, es decir, en ayunas, tomá un vaso de agua con medio limón exprimido.
2) Aumentá y variá el consumo de frutas y verduras. Son ricos en vitaminas, minerales y fibra. Las vitaminas y los minerales colaboran con el adecuado mantenimiento y funcionamiento del cuerpo. La fibra regula la función intestinal, dando sensación de saciedad, y puede prevenir diversas enfermedades.
3) Menos sal. Bajá el consumo de sal. Retira el salero de la mesa. El sodio es esencial para el buen funcionamiento del cuerpo pero en exceso puede conducir a un aumento de la presión arterial (hipertensión) y otras enfermedades. Evitá las especias preparadas, alimentos enlatados y embutidos. Usña hierbas frescas para mejorar el sabor de tus comidas.
4) Evitá dietas de un solo tipo de alimento. No hagas una dieta a base de un solo tipo de alimento o nutriente. Trata de variar la mayoría de los alimentos.
5) Menos carne y más variada. Con respecto a la carne, tratá de variar los tipos durante la semana con pollo, res, cerdo y preferiblemente, consumilos sólo una vez al día, o mejor solo un par de veces por semana.
Muy pronto más tips para que empieces de a poco y no te frustres. La base de una buena alimentación tiene que ver con la incorporación de hábitos saludables, y no con dietas súper estrictas.
Recordá siempre visitar un nutricionista.
Fuente: unisima