En resfríos comunes hay síntomas que son normales y tips que pueden ayudar a pasar el mal momento.
Noches difíciles. Cuando hay ataques recurrentes de tos, no duerme ni el bebé ni sus padres. Además del agotamiento, nos invade la impotencia de no poder aliviarlo. Sin embargo, hay algunas estrategias comprobadas para ayudar al bebé siempre y cuando se trate de un resfriado común, resultado de infecciones virales.
Si vemos que tiene períodos de tos intensa y fiebre, pero la mayor parte del tiempo está bien, sonríe, salta y no deja de tomar líquidos, entonces probablemente sea un resfriado común. Si bien no es grave, puede ser bastante molesto y no hay una medicación de eficacia comprobada que pueda aliviar la tos en los bebés, salvo en caso de que sea necesario reducir la fiebre.
“Esto es muy simple. En estas situaciones el sistema respiratorio se caracteriza por ser ruidoso al tener una sobrecarga de secreciones. La respuesta al excedente de moco formado, es la tos que elimina ese ‘sobrante’ buscando el equilibrio”, explica el kinesiólogo fisiatra Osvaldo Gonzalez (MN 2903), el encargado del Servicio de internación, neonatología y guardia del Sanatorio de la Trinidad San Isidro. De “forma natural”, el organismo con la tos, evita entrar en un cuadro de dificultad respiratoria que puede terminar en insuficiencia respiratoria.
“Todos los días me la paso educando a alumnos y padres sobre este tema y les digo que los ruidos y la tos no son signos de alarma y no se debe hacer nada, excepto cuando alteran la vida cotidiana del chico: el sueño, la alimentación, el estado de animo -entre excitado o deprimido- y la temperatura corporal, cosas que sí motivarían la consulta médica”, detalla el especialista.
González resalta que saber esto es fundamental ya que existe el mito de que el niño que hace ruidos respiratorios y tiene tos está enfermo. Además, es absolutamente normal que en un acceso de tos a los chicos se les ponga la cara roja (congestión facial) y cianótica (color azulado), o alrededor de la boca (cianosis del llanto y la tos). Por lo general, estos cuadros de tos pueden comenzar y terminar por sí solos en un promedio variable de tres a siete días.
¿Qué podemos hacer?
– Los papás solo deberán contener al chico en brazos ya que los accesos importantes producen angustia, temor y nauseas.
– En el caso de bebés de menos de 6 meses que solo se alimentan de leche, puede ser beneficioso aumentar la cantidad que se le da durante ese período.
– En términos de prevención, la recomendación general de los pediatras es mantener las vacunas al día, lavarle las manos con frecuencias y evitar grandes aglomeraciones.
Sobre los humidificadores
Si bien puede ser útil para la hidratación de las vías respiratorias, también puede ser peligroso. “El exceso de humedad es perjudicial sobre todo para las familias de alérgicos, porque propicia la proliferación de ácaros y de moho”, explica Fátima Rodrigues Fernandes, pediatra y alergóloga del Hospital Infantil Sabará, en São Paulo, Brasil.
A pesar de la creciente popularidad en el uso de humidificadores en las habitaciones de los niños que sufren de tos, no existen estudios clínicos adecuados para evaluar la eficacia de ese método.