El encuentro está pautado para este martes a las 17.00. Desde las empresas se mostraron su disconformidad con la medida que el presidente Macri aplicó por DNU.
El Gobierno nacional recibirá este martes a la empresas que integran la cadena de valor de los hidrocarburos -productoras, refinadoras y comercializadoras- quienes llegarán con el reclamo de levantar el congelamiento por 90 días para el precio de los combustibles y el barril de crudo, y el argumento de que la medida obligará a revisar su actividad y sus inversiones.
Al encuentro convocado por la Secretaría de Energía, que está previsto para las 17, se sumarán los gobernadores que se pronunciaron la semana pasada contra el Decreto de Necesidad y Urgencia del presidente Mauricio Macri por entender que afecta no sólo los ingresos por regalías de las provincias sino también la actividad económicas de esos distritos.
Así, el Gobierno nacional deberá escuchar la advertencia de los gobernadores de Neuquén, Omar Gutiérrez, y de Río Negro, Alberto Weretilneck, quienes admitieron que podrán recurrir con un pedido de inconstitucionalidad del DNU ante la Corte Suprema de Justicia.
A pesar de los matices que pueden presentar las petroleras según se ubiquen en el segmento de producción, refinación o comercialización de combustibles, las empresas plantean que la medida afecta a toda la industria y provocará pérdidas por los próximos tres meses de implementación.
Fuentes del sector explicaron que, de sostenerse mañana la medida, el congelamiento afectará casi de inmediato las inversiones previstas y las operaciones en marcha en la formación de Vaca Muerta con el levantamiento de equipos hoy en funcionamiento.
Pérdidas en conjunto
“Si la reunión es desfavorable va a haber impacto en la actividad”, aseveraron desde una de las compañías que participará del encuentro con el Gobierno. La propuesta de las empresas y de las provincias es que el esfuerzo no lo absorba un solo sector sino que se distribuyan entre el gobierno nacional, los provinciales, las refinadoras y productoras, como una manera de poder evitar el esquema de congelamiento.
Las empresas también señalan el alerta que la medida generó en los gremios del sector, en particular la masiva asamblea convocada -para mañana las 11 en al ciudad de Neuquén- por el Sindicato de Petróleo y Gas Privado que encabeza el senador Guillermo Pereyra, quien advirtió que la decisión generará despidos en el sector.
La misma alerta se expresó desde la Federación de Cámaras del Sector Energético de Neuquén (Fecene) -que nuclea a más de 300 empresas de servicios- al rechazar congelamiento del precio del barril de crudo por entender que resulta contrario a la necesidad de mantener el ritmo de crecimiento programado de Vaca Muerta.
Una decena de petroleras apoyaron la semana pasada, apenas conocido el congelamiento, una carta dirigida al secretario de Energía, Gustavo Lopetegui en la que advertían que el precio de crudo para los productores no integrados seguramente resultará en una caída de la actividad y revisión de los planes de inversión ya comprometidos.
Aunque la carta no se entregó porque la medida salió por DNU -tras una frustrada reunión en Hacienda- se asegura que suscribían sus términos empresas como Tecpetrol, Shell, Total, Pluspetrol, Equinor, Chevron, Exxon y Vista O&G, cuyo CEO Gastón Remy surgió como virtual vocero.
Si bien estas empresas netamente productoras de hidrocarburos se presentaron como las más afectadas, desde las compañías integradas -es decir que abarcan todos los extremos de la cadena- como YPF y Pan American Energy, también manifestaban que serán perjudicadas por la medida.
En ese sentido, el CEO de YPF, Daniel González, adelantó el viernes a los accionistas que el congelamiento tendrá un costo para la compañía de unos 120 millones de dólares mensuales, es decir unos 360 millones para el período previsto de la medida que serán compensados con una reducción de las inversiones en similar magnitud.