Una remisera de la ciudad denuncia que una pasajera “de toda la vida” se descompensó en su móvil y la llevó de urgencia a un sanatorio céntrico en el cual demoraron más de 15 minutos en atenderla y, cuando lo hicieron, fue demasiado tarde.
Nancy Maurer es remisera de la empresa ISIS en la ciudad de Santa Fe y, debido a su profesión, ya tenía una relación de “amistad” con María del Carmen Chacón, pasajera habitual. “Era una amiga mas que una pasajera, la fui a buscar el martes a la tarde porque tenía turno al médico. En medio del viaje se descompensó y comenzó a agitarse mucho, estaba muy agitada”, relató en Estilo EME la profesional del volante.
Al ver la situación, desvió su camino para dirigirse al Sanatorio Diagnóstico (ubicado en 25 de mayo 3240) porque allí atienden a los afiliados de PAMI. De manera urgente se bajó y en la recepción “pedimos un camillero o una silla de ruedas porque [Chacón] no podía caminar y respiraba con mucha dificultad, se ahogaba, se me moría“. Pese a ver la desesperación de Maurer, quienes la atendieron le dijeron que “los médicos estaban atendiendo urgencias y no me iban a atender a mí”.
Quince minutos esperando en la puerta
Pasaron los minutos y nadie salía buscar a la pasajera que se moría lentamente en el asiento trasero del remis. “Entré y volvimos a pedir porque pasaron mas de 10 minutos pero me respondieron ‘ya llamamos al camillero’ mientras me mostraban la llamada realizada por Whatsapp”.
Mientras Nancy se peleaba con los recepcionistas, María Chacón comenzó a gritar “porque entró en paro cardíaco, no la pude sacar a upa porque no me dio la fuerza. Quince minutos después entró al Sanatorio pero ya estaba muerta“.
Finalmente, la remisera relató que “el camillero llegó y dijo: ‘¿A dónde está?‘ dando a entender que no era nada grave para tener apuro”.
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