Hace 20 años, Rodrigo Noya saltó a la fama por su participación en Agrandadytos, un ciclo en el que Dady Brieva charlaba con chicos que despertaban carcajadas con sus ocurrencias. Con el correr de los años, el muchacho fue consagrándose como actor con sus trabajos en cine y TV. Hermanos y detectives; Los únicos; Las aventuras del Dr. Miniatura; Fanny, la fan; El marginal y Millenials fueron algunos de los programas en los que cuales se lució.
El joven recordó cómo vivía de niño ese venir a Buenos Aires desde Chascomús, su ciudad natal, para grabar junto a su hermana el mano a mano con Brieva. “Venir a Buenos Aires era todo un plan porque aprovechábamos para visitar a nuestros abuelos, ir al cine y pasear con mi familia”, contó.
En el ciclo de Ángel de Brito, el actor reveló que sus padres hacían un esfuerzo muy grande para poder viajar. “No sé si está bien que diga esto… pero no nos pagaban por ir a Agrandadytos. Mis papás no tenían ni un peso. Mi mamá juntaba las monedas para pagar los peajes. Y cuando nos empezaron a decir que vayamos más seguido, ella pidió por favor que nos pagaran los viáticos (la nafta y los peajes)”, detalló.
En el presente, Noya se luce como figura del Bailando 2019. Al ser consultado sobre su experiencia en la competencia de Showmatch, se pronunció sorprendido por cómo se reavivó su popularidad tras su aparición en el programa. “La verdad, siento la repercusión que te da el Bailando. En el pasado viví algo similar, pero capaz, al ser chico, no la podía racionalizar”, sostuvo.