El entrenador Sabalero Pablo Lavallén ya piensa en variantes para dar vuelta el resultado ante Zulia en Santa Fe.
Colón encarará días llenos de adrenalina a la espera de la revancha de los cuartos de final de la Copa Sudamericana el próximo jueves cuando reciba, desde las 21.30, a Zulia de Venezuela. El 1-0 en el Pachencho Romero de Macaibo fue un duro golpe –otro más– para un plantel que quiere hacer las cosas bien para ponerle fin a la malaria, pero por diferentes factores esto todavía no puede ser posible.
De todas maneras, crece el optimismo puertas adentro para doblegar a su rival y así acceder a las semifinales, en algo que traería importantes réditos económicos y además un prestigio deportivo. Aunque para que esto sea posible deberá haber una muestra de personalidad y, sobre todo, juego y ambición.
Si bien es cierto que no se sabe qué formación parará el entrenador Pablo Lavallén, hay algunos datos que se caen de maduro. En principio, volvería a la titularidad el arquero Leonardo Burián, que no pudo estar en el primer cotejo por el fallecimiento de su hermano. Después, no estará el expulsado Gastón Díaz, por lo que ingresaría nuevamente Gonzalo Escobar para que Alex Vigo sea nuevamente marcador de punta derecho.
Después, es complejo aventurarse a especular con la aparición de un nuevo volante o un compañero de ataque para Luis Rodríguez, que peleó en soledad con los centrales venezolanos casi sin peso en el área. En este sentido, como hay que arriesgar, puede que sumen porotos Nicolás Leguizamón y Wilson Morelo.
No hay demasiado tiempo para planificar y andar improvisando, por lo que el técnico apelará a lo anímico y algún retoque de piezas para intentar cambiar el ambiente y que Colón se plante y saque pecho ante Zulia.