Se trata de un joven de 20 años acusado de ser quien condujo la moto en la que transportó al investigado por la Justicia de Menores como autor del delito.
La fiscal Cristina Ferraro pedirá una pena de 20 años de prisión para el joven acusado de ser el partícipe necesario del homicidio de Augusto Paulón cometido en 2018 en la ciudad de Santa Fe. Así lo sostuvo la funcionaria del MPA en la audiencia preliminar llevada a cabo en los tribunales de la capital provincial ante la jueza de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Rosana Carrara.
El acusado tiene 20 años, sus iniciales son NAAV y Ferraro lo acusó de ser partícipe necesario del delito de homicidio doblemente calificado (por el empleo de arma de fuego y por la intervención de un menor de 18 años). La funcionaria del MPA recordó que “el acusado fue detenido el 18 de abril de 2018, fue imputado el 20 de abril y dos días más tarde se ordenó su prisión preventiva, la cual se mantiene hasta la actualidad”.
Por su parte, un adolescente que era menor de edad al momento del delito, es investigado como autor del homicidio por el Juzgado de Primera Instancia de Distrito de Menores, Primera Nominación.
“El homicidio de Paulón –que tenía 22 años al momento del hecho– fue cometido minutos después de las 4 de la madrugada del viernes 19 de enero del año pasado en la plazoleta ubicada en la intersección de las calles Quintana y Pasaje Lassaga”, relató la fiscal. “La víctima –que estaba con tres amigas y con dos amigos– recibió tres disparos de arma de fuego, uno de ellos en la cabeza y los otros en el brazo derecho. A raíz de este ataque, debió ser trasladado al hospital José María Cullen, donde finalmente murió el sábado 20 de enero”, agregó.
“La atribución a NAAV es por haber sido quien condujo la motocicleta en la que transportó a quien fue autor material del homicidio. Entre ellos son primos”, detalló Ferraro. “Deliberada e intencionalmente, NAAV prestó un auxilio sin el cual no se podría haber consumado el homicidio de Paulón”, argumentó.
Ferraro sostuvo que “el aporte necesario surge de los registros de las cámaras de seguridad en los que quedaron grabados los recorridos previos y posteriores a la comisión del hecho”. La funcionaria del MPA añadió que “en un primer momento, el acusado transportó a su primo hasta el lugar en el que estaba la víctima para corroborar que efectivamente estaba en ése lugar. Luego, fueron a la casa del joven investigado como autor del homicidio, donde buscó el arma de fuego con la que consumó el ataque. Lo transportó nuevamente a la plaza en la que estaba Paulón, lo esperó a escasos metros mientras le disparaba y, finalmente, escaparon del lugar en la moto”.
“El acusado aportó una asistencia indispensable conforme al plan de su primo: lo trasladó en todo momento, aguardó la realización del ataque y luego lo retiró del lugar de manera rauda y efectiva para evitar su aprehensión”, subrayó Ferraro.
La fiscal también se refirió a la pena solicitada y explicó que “tuvimos en cuenta el peligro causado a las otras personas que estaban próximas a la víctima; el despliegue de las conductas en plena vía pública; la características sorpresivas del ataque; y el estado de indefensión en el que estaba Paulón”. También hizo hincapié en que “los motivos que llevaron al acusado a asistir a su primo para que concrete el ataque” y señaló que “la agresión fue sólo por celos, a raíz de que su exnovia estaba en compañía de Paulón en esa plaza”.
