El candidato del Frente de Todos analizó la campaña con su compañera de fórmula y después trabajó en su presentación para el debate presidencial que protagonizará en Santa Fe.
Cristina Fernández regresó en la madrugada de ayer desde Cuba donde pasó doce días junto a su hija Florencia que sigue bajo tratamiento médico. Al mediodía ya estaba en actividad tras casi dos semanas fuera de la mapaña. Claro que, fiel a su nuevo estilo, todo lo que hizo fue en forma reservada. Como ya es casi una costumbre antes y después de cada viaje de la candidata a vicepresidenta a La Habana, Alberto Fernández fue a visitarla. La reunión fue a solas y larga. Los temas pueden intuirse, aunque ninguno de los dos hizo comentarios: la salud de Florencia, lo que queda de campaña, las últimas novedades. Él se irá el domingo a Santa Fe a participar del primer debate de candidatos a presidentes mientras que ella volará el sábado a El Calafate donde el lunes 14 presentará su libro “Sinceramente”.
El candidato a presidente del Frente de Todos arrancó la semana con el lanzamiento del plan “Argentina contra el hambre” en la Facultad de Agronomía y Veterinaria y el mismo lunes 7, por la tarde, se reencontró con Daniel Martínez, intendente de Montevideo y candidato a presidente del Frente Amplio de Uruguay. Coincide el calendario electoral y en ambas orillas del Río de la Plata el 27 de octubre se elige presidente, salvo que tengan que ir a segunda vuelta.
Además esta semana Fernández recibió a un grupo de delegados del Banco Mundial que conversan con los distintos candidatos a presidentes y le hizo un guiño a su partido al visitar la sede del Consejo Nacional Justicialista donde reivindicó la figura de su presidente, José Luis Gioja, que afrontó incluso una intervención judicial y aún así siguió reuniendo a los congresales y buscó la unidad del peronismo. Sobre el escenario los acompañaron el gobernador formoseño Gildo Insfrán y Ginés González García quien entregó un documento con propuestas al candidato. Todos celebraron el resultado de las PASO y pidieron mantener el esfuerzo para ratificar o ampliar el triunfo.
Con Pepe
Fernández completa la semana con una cábala. Después de que Cristina Fernández lo eligió para ser su candidato se subió a Buquebus y cruzó el Río de la Plata. El principal motivo de su viaje a Montevideo, donde charló con el intendente Martínez que en ese momento era precandidato como él, fue ir hasta la chacra de José ‘Pepe’ Mujica. El ex presidente uruguayo lo había recibido varias veces, una de ellas cuando le llevó a Florencio Randazzo, por entonces candidato a senador por Cumplir. “A ver cuándo venís vos como candidato”, lo desafió Mujica. Por eso Fernández fue a tener casi una charla motivacional con el uruguayo. Es más, como él han viajado varios dirigentes, como el candidato a jefe de gobierno porteño Matías Lammens, su candidata a vice, Gisela Marziotta, esta semana; el intendente de Almiertante Brown, Mariano Cascallaes, a la más joven de todos, Ofelia Fernández. Van como en procesión a ver un gurú, incluso aquellos que reniegan de los gurúes.
En vísperas del debate, Fernández se encierra a solas para leer. No le tiene miedo ni le preocupa el debate, sostienen, porque confía en lo que quiere decir y en sus ideas. Evita entrenarse porque apuesta a mostrarse “auténtico”. Y esta tarde además se dará algo así como un placer: una charla justamente con Mujica en el Colegio Nacional Buenos Aires. Varios en el Frente de Todos pasaron por las aulas del Colegio: Axel Kicillof, Mariano Recalde y también Lammens. El evento, organizado por el Centro de Estudiantes, será cerrado para los alumnos. Se descuenta que como el Colegio Nacional Pellegrini, el Pelle, jugará más o menos de local.
La agenda de Mujica se completa con una conferencia de prensa en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo y una charla con uruguayos.