Entre los equipos que dejan abierta una puerta trasera para que un ciberdelincuente los ataque se encuentran los populares Samsung Galaxy S7, S8 y S9
Project Zero, el grupo de investigadores que responde a Google, descubrió una grave vulnerabilidad en varios teléfonos Android por la cual los equipos dejan una puerta trasera abierta para que un ciberdeliencuente se haga con el control de estos.
Los fabricantes de los dispositivos que cuentan con este peligroso bug “de fábrica” ya fueron alertados y la gran mayoría ya desarrolló un parche de seguridad.
Según explicaron los expertos, el código del kernel del sistema operativo Android es el señalado y puede usarse para obtener el rooting o rooteo, que es el proceso que permite a los usuarios de teléfonos inteligentes, tablets y otros aparatos con el sistema operativo móvil Android obtener control privilegiado (conocido como acceso root o permisos de superusuario).