Un joven de 22 años que estaba internado en sala 5 del Hospital Cullen, fue trasladado el martes a la tarde a la comisaría 4° tras sustraer el celular de una mujer del personal en la sala 8. Luego volvió al hospital por las condiciones en las que se encontraba.
El robo ocurrió cerca de las 19, cuando la mujer se dio cuenta de que faltaba su celular y avisó a los policías. Como había visto al joven en la sala, los oficiales policiales realizaron la requisa y encontraron el teléfono entre los elementos del paciente.
El joven estaba en el lugar porque se realizó un trasplante de riñón. Luego de estar un tiempo en la comisaría, debió ser trasladado nuevamente al hospital por su estado de salud.