Ante las inundaciones en Quilmes y Esteban Echeverría, la mandataria tuvo que admitir que la Provincia todavía se inunda a pesar del latiguillo de su jefe político.
El presidente Mauricio Macri llegó este martes a Pergamino en el marco de la gira “Sí, se puede” con la que pretende forzar un balotaje en las elecciones presidenciales, y una vez más hubo escasa concentración de vecinos.
Junto a Macri estuvieron la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal y la diputada nacional Elisa Carrió, algunas de las principales espadas de Juntos por el Cambio, que sin embargo no alcanzaron para llenar siquiera media plaza en Pergamino.
En ese marco, Macri intentó ser gracioso e interrumpió a Vidal para lanzar su ya consabido “no se inunda más”, sin embargo a la mandataria provincial no le quedó más opción, ante la evidencia de la realidad, que contradecirlo y admitir que las inundaciones siguen siendo un problema en el distrito que gobierna.
Aunque la gira del “Sí, se puede” apenas puede reunir más que un par de centenares de personas en cada lugar al que llega, Macri apuesta a una “marcha del millón” en la ciudad de Buenos Aires para el próximo sábado.