A mediados de octubre, Marixa Balli asustó a todos tras sufrir una terrible caída desde cuatro metros de altura. Se encontraba ordenando cajas en el depósito de su local de ropa, en la avenida Avellaneda en el barrio porteño de Flores, cuando de repente se resbaló. La ambulancia llegó de inmediato y fue trasladada a un hospital público, donde se le hicieron las primeras curaciones.
Los estudios confirmaron que sufrió varios politraumatismos producto del impacto. Le diagnosticaron “policontusiones y traumatismo de pelvis”. Horas después fue derivada a una clínica de su obra social.
Se trata de una postal del pasado, de sus mejores épocas como bailarina y vedette. Se la ve completamente desnuda pero envuelta en plumas negras. ¡Diosa total!