Amalia Granata dijo basta. Y antes de asumir formalmente como diputada de la provincia de Santa Fe, decidió abandonar el bloque con el que llegó a la banca, debido a las diferencias con cuatro de los integrantes de este sector que viene manifestando sus discrepancias desde pocos días después de las elecciones.
En esta secuencia de roces y enfrentamientos, se entremezclan posiciones sobre el aborto, miradas desde el catolicismo y posturas de sectores evangélicos.
De hecho, hace algunas semanas el pastor evangélico Walter Ghione, uno de los integrantes del bloque, salió a criticar a Granata por su acercamiento al PRO: “No cayó muy bien que se meta en la interna de otro partido”. Lo dijo luego de que la diputada se tomara fotos junto a representantes de ses sector en al ciudad de Rosario.
Ahora, Granata resolvió abandonar el bloque “Unite” y conformar, junto a la diputada electa Betina Florito el nuevo bloque denominado “Somos Vida”.
De esta manera, Granata y Florito conformarán el bloque “Somos Vida”; mientras que los diputados electos Walter Ghione (pastor evangelista), Nicolás Mayoraz (abogado vinculado a la Iglesia católica), Juan Domingo Argañaraz (profesor evangelista) y Natalia Armas (identificada con los sectores eclesiásticos) integrarán el bloque “Unite”.
Según Granata, “el 16 de junio casi 300 mil santafesinos nos dieron su confianza para que nos dediquemos a dos razones centrales: defender la vida en todas las circunstancias y demostrar que somos diferentes al resto de la política”.
“Lamentablemente -añadió- cuatro diputados del sector no comparten esta visión y han decidido tomar un camino separado. No quiero que este tipo de problemas propios de la vieja política desenfoque la razón esencial por la cual nos eligieron. Por eso decidimos conformar, a partir del 5 de diciembre, el bloque de diputados Somos Vida junto a Betina Florito”.
Granata insistió en que “la política esta llena de engaños y tentaciones. De falsas promesas y alianzas que se desarman y rearman al igual que se cambian convicciones como si fuera una remera. Pero a nosotros nos eligieron para luchar contra la política que se hace de espaldas a la gente, en recintos cerrados y no de frente, en la calle y de manera transparente. Nos eligieron por ser independientes y no pertenecer a ninguna estructura partidaria tradicional del color que sea”.
“Queremos que la política deje de ser una casta. Para abrirle paso a mas a santafesinos que puedan ser representados”, remarcó.
En las pasadas elecciones, Granata logró una sorprendente cantidad de votos levantando las banderas en contra del aborto y logró que junto a ella ingresaran a la Cámara de Diputados otros cinco dirigentes de su sector. Pero pronto comenzó a crujir la situación dentro del bloque, sobre todo a la hora de definir funciones y responsabilidades dentro de la Cámara.