Una 20 mujeres contratadas por la Comuna de Hersilia hacen sus necesidades debajo de los eucaliptus del Ferrocarril porque el intendente, Celestino Nicolau, les negó la llave de los baños y cuando fueron a reclamar las castigó agregando horas de trabajo por el mismo precio.
Radio Eme Ceres recabó información con colegas de Hersilia quienes contaron sobre el caso de maltrato laboral que sufren las trabajadoras del Barrido.
“Solo pedimos usar el baño” relataron las mujeres en su reclamo que solo pretende dignidad para trabajar.
El grupo de mujeres abocadas a la tarea de barrido de la calles solicitan poder hacer uso del baño de la Estación de Trenes, manifiestan haber planteado la situación al presidente comunal y a las asistentes sociales, pero nunca recibieron una solución por lo que deben hacer sus necesidades en la zona de eucaliptus del predio del ferrocarril.
A través de este medio apelan a la comprensión de las autoridades. Según señalan las trabajadoras, la autoridad comunal les ofreció la llave del baño y que se hagan cargo de la limpieza a lo que respondieron que sí se pueden hacer cargo, pero solo por el uso que ellas hagan en su horario de trabajo que es de 4 de la madrugada a 8 de la mañana y no por el uso que hagan otras personas en otros horarios.
Luego que se conoció el reclamo y trascendió en los medios, el intendente local, no solo no resolvió el problema de las trabajadoras, sino que las castigó
Luego del reclamo hecho público por el grupo de mujeres barredoras que vienen solicitando poder usar el baño durante las horas de trabajo, la Comuna local las convocó para comunicarles que no le entregará la llave del baño y que de ahora en adelante trabajarán desde las 6 a las 11 de la mañana, una hora diaria más, en un horario más caluroso y por la misma percibirán la misma paga de $280 por día.