El conductor del auto que el jueves por la noche protagonizó un accidente en Circunvalación y que derivó en la muerte de su hija, de 2 años de edad, declaró a priori que la causa de todo fue el lanzamiento de un adoquín desde la banquina contra el vehículo, y que eso lo llevó a reaccionar con una frenada abrupta que motivó el golpe de su beba, quien iría en brazos de su novia, en el asiento delantero.
La fiscal a cargo de la pesquisa reparó en indicios de que la niña no viajaba en condiciones óptimas de seguridad dentro del vehículo: no había sillita reglamentaria en el habitáculo, y el calzado de la víctima quedó en el asiento delantero. No obstante, pidió aguardar el avance de la investigación.
En cuanto a quienes arrojaron el adoquín y causaron la tragedia, nada se sabe. La fiscal Valeria Piazza Iglesias admitió que no hay más testigos que el relato del propio padre de la víctima, Federico Brest, de 25 años. Tampoco hay videocámaras que cubrieran la tragedia, ocurrida hacia las 9 de la noche del jueves en la avenida Circunvalación, entre el cruce del bulevar Seguí y de 27 de Febrero.
El objeto arrojado era un adoquín de construcción, de 25 centímetros de diámetro, según la fiscal. Los peritos lo hallaron a 200 metros de donde el Fiat Palio de Brest se detuvo.