El manager fue visto mientras se retiraba enfurecido del salón y comenzaron a especular con una mala relación.
A horas de dar el sí, ocurrió un confuso episodio en los alrededores del palacio Sans Souci, lugar donde esta tarde se llevará a cabo la boda entre Pampita Ardohain y Roberto García Moritán. Pancho Dotto.
Pancho Dotto llegó hasta el lugar, ubicado en el partido de San Fernando, alrededor de las 14 horas y quiso acceder al salón, aunque la seguridad no lo dejó debido a que su nombre no estaba asentado en la lista de invitados.
Dotto llegó al lugar y preguntó dónde podía estacionar. Al parecer, los agentes de tránsito y seguridad empezaron a comunicarse entre sí, ya que no encontraban su nombre en la planilla de las personas autorizadas a ingresar. El manager -que no pudo pasar ni el primer anillo de seguridad- puso marcha atrás y se retiró muy enojado.
“Pasé por ahí porque vivo a pocas cuadras y estaba paseando. Estoy en bermudas, relax total y pasé para averiguar cómo era el tema del estacionamiento porque tengo una amiga en común con Pampita que va esta noche. Me preguntó a cuántas cuadras estaba y cómo era el tema del estacionamiento, y fui a averiguarle eso. Ahora estoy comiendo en la estación muy cerca de ahí, pero no pasó nada”, advirtió el empresario.
“Aunque cada vez que se cruzan en Punta del Este se saludan y charlan, la relación comercial entre ellos no habría terminado muy bien. Pancho no habría depositado en AFIP las contribuciones correspondientes a algunas campañas. Carolina salió a pedirle explicaciones y, tras no ponerse de acuerdo, decidieron cortar su relación comercial en el año 2010”, contó Marcela Tauro en el marco de esta información.