La Municipalidad culminó el domingo de realizar el recambio de toda la ornamentación que delimita e ilumina el entorno del Monumento Nacional a la Bandera.
Las míticas esferas que fueron instaladas hace más de 25 años fueron reemplazadas por piezas que evocan la llama del soldado desconocido (llama votiva) y la estrella de 8 puntas que está en la torre del Monumento.
El Monumento es el ícono de Rosario y la principal atracción turística de la ciudad. Por allí pasan anualmente más de 25 mil niños y niñas de todo el país durante las tradicionales promesas de la bandera y es recorrido por miles de familias y visitantes de manera permanente semana a semana.
La renovación se realiza en cumplimiento de los mandatos elaborados por el Consejo de Niñas y Niños, quienes establecen que la ciudad es para todas y todos, y que el Monumento es un lugar poderoso, de encuentro, convivencia, y comprensión de las diferencias, en torno a un proyecto común que implica el respeto, la solidaridad, la ponderación y el disfrute de todo el espacio público.
Los nuevos dispositivos son de diseño original confeccionado por los equipos técnicos de la Secretaría de Planeamiento municipal siguiendo lineamientos estéticos y simbólicos del Monumento Nacional a la Bandera. Se trata de un bolardo rotomoldeado, compuesto por dos piezas y un cuerpo difusor de iluminación. Su forma evoca la llama del soldado desconocido (llama votiva) y su deconstrucción geométrica incorpora la estrella de 8 puntas que se identifica en la torre del Monumento, símbolo que también se repite en los mástiles ubicados a ambos lados del Patio Cívico, en aberturas de la sala de las banderas y se dibuja en el piso de mármol de la Cripta.
La nueva ornamentación es una pieza rotomoldeada de polietileno de alta densidad