Este martes la Plaza de Mayo se convirtió en una fiesta por la asunción de Alberto Fernández como presidente. El mar de asistentes trajo vendedores de distinto tipo, como no podía faltar, hubo choripanes.
Uno de los vendedores, que se mostró contento porque estaba vendiendo mucho, afirmó: “Por suerte volvimos”.
En medio de su trajín, el parrillero contó que ofrecía hamburugesas y choripanes por 100 pesos y el sandwich de bondiola por 200 pesos.
Consultado si estaba contento por el día, confesó: “Fueron cuatro años de miseria, la verdad que si”. También se mostró confiado: “Siempre se levantó este país”.