El país ardió durante varios meses y luego tuvo que soportar granizos, lluvias y temporales. Pero hubo una especie que se vio beneficiada por esas condiciones de vida.
Se calcula que miles (¿milones?) de animales y al menos 28 personas murieron en los incendios que asolaron el sur, oeste y este de Australia desde septiembre de 2019 hasta la fecha. Al fuego le siguió el agua con temporales, granizo gigante en el sur e inundaciones en muchas zonas del país.
Pero mientras la mayoría de los animales sufrían (humanos incluidos, porque hubo 28 muertos y más de 3.000 desplazados) hubo una especie que prosperó por las condiciones ambientales actuales: la araña de tela en embudo, un tipo de arácnido venenoso de unos 5 centímetros que es originario de Australia.
“Las arañas de tela en embudo son potencialmente una de las más peligrosas del planeta en términos de mordida a humanos, y tenemos que tratar el tema muy seriamente”, explicó Daniel Rumsey, vocero de del Parque Australiano de Reptiles, ubicado en Somersby, Nueva Gales del Sur, informó el sitio 9news.
“Debido a la lluvia reciente y ahora al calor que experimentamos en estos días, las arañas de tela en embudo empezarán a moverse”, anticipó en un mensaje de Facebook en el que además detalló que los arácnidos pueden entrar a las casas por el techo o el suelo.