El gobernador provincial Omar Perotti admitió que están en una “emergencia” y ejerce presión para establecer una “nueva fuerza policial”.
Tras la oleada de crímenes en Rosario, Omar Perotti, gobernador de la provincia de Santa Fe, catalogó a la situación que se vive en el territorio como una “emergencia en seguridad”. Advirtió que tiene planes de renovar la Policía tras el homicidio de un joven durante la tarde, lo cual suma un total de 17 crímenes en una semana.
Hace algunas horas, el jefe de la Policía provincial aseguró que desembarcarían en la ciudad 3.000 nuevos gendarmes pero el Ministerio de Seguridad de la Nación negó este desarrollo.
Victor Sarnaglia, jefe de la Policía de Santa Fe, aseguró que desde el Gobierno enviarían este refuerzo. Por otro lado, también se avanza en la creación de un Comando Conjunto de fuerzas provinciales y federales con el objetivo de apoyar la situación en la ciudad.
Sabina Frederic se comunicó con Marcelo Saín, su par en la provincia, y ambos planean avanzar en este desarrollo para redistribuir a los oficiales “según las necesidades”. También aseguraron que se desarrollaron varios encuentros entre funcionarios, tanto nacionales como locales, para implementar el convenio.