El interventor de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), Mauricio Caussi, insistió con la necesidad de contar con la ley de emergencia económica para “mantener las tarifas por 180 días” y graficó el estado de precariedad del servicio en el norte provincial: “Se apoyan dos palomas en un cable y se corta la luz una semana”.
Por otro lado, Caussi aseguró que la gestión anterior dejó una deuda de 4.300 millones de pesos y un déficit que se multiplicó por seis.
Alta tensión por los números
Caussi respondió en Rosario a las declaraciones de la ex secretaria de Energía de Santa Fe, Verónica Geese, quien acusó a la nueva gestión de “generar deuda” y “actuar una catástrofe”.
Entre otros puntos, la ex funcionaria dijo que hasta el 29 de noviembre la EPE no tenía deudas con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa). Ese primer punto fue visitado por el nuevo interventor, quien señaló una suerte de trampa en esa afirmación.
“Tenemos una nota de las autoridades de Camessa que expresan cuál era la deuda que la provincia tenía con la empresa nacional el 12 de diciembre del año pasado y era por 4.336 millones pesos, originados en consumos no pagos de julio y de agosto que habían sido refinanciados para que venzan a los pocos días de asumir nosotros”, afirmó Caussi.
A esos pasivos, se sumaron los consumos de octubre que vencieron el 9 de diciembre, añadió el funcionario designado por Omar Perotti. “Cuándo se dice que no hay deuda, cómo es que nosotros tuvimos que pagar 518 millones de pesos de intereses, validando tasas de interés casi usurarias (ante Cammesa)”, siguió.
El segundo punto detallado por Caussi fue la evolución del déficit en el último año de gestión de Miguel Lifschitz. De 500 millones de pesos de rojo en el ejercicio 2018, se pasó 3.000 millones en 2019. “El déficit se multiplicó por seis y las proyecciones para este año son más complicadas aún. La curva de evolución de esa deuda creció exponencialmente durante el segundo semestre por decisiones que se tomaron durante el período electoral”, aseguró.
Caussi aseguró que la dirección que lo precedió al frente de la empresa provincial no dejó “para nada” el dinero suficiente en caja para hacer frente a las obligaciones: sueldos, aguinaldos, aportes a la caja de jubilación y pago de proveedores.
Agregó a ese cuadro general que la proyección de ingresos fijada en 51 mil millones de pesos en el presupuesto 2020 “no es real”. Dijo que “está entre 6 mil y 7 mil millones de pesos sobreestimada” por lo que el agujero a tapar en las arcas de la EPE sería mayor (“más el impacto que tenga la paritaria”, sumó el interventor).
Ni apagón ni suba de tarifas
Caussi aclaró que no hay riesgo de que Cammesa, la mayorista nacional, corte el suministro de energía a Santa Fe. “Nunca hemos dicho que nos iban a bajar la palanca, no hay antecedentes”, señaló pero aclaró que “la ley (de emergencia económica) nos va a dar las herramientas para renegociar contratos y prescindir de otros no imprescindibles (como alquileres y servicios)”.
El interventor habló de “un plan de austeridad” ejecutado en su gestión, en la que congeló los sueldos de los jerárquicos y gastos de movilidad, pero reiteró la necesidad de contar con herramientas extraordinarias porque en algunas partes de la provincia el servicio mejoró pero en otros “deja muchísimo que desear
“Tengo a los productores agropecuarios de la zona norte de Santa Fe, donde se apoyan dos palomas en un cable y se corta la luz una semana, y tenemos tambos con serios problema de energía”, graficó.
“En el cortísimo plazo, esta situación no afectará en nada al usuario. Tenemos la firme convicción de mantener las tarifas por 180 días y necesitamos la ley de necesidad pública. También queremos disminuir las pérdidas técnicas y no técnicas: uno de cada cinco pesos se pierde por esa vía”, aseveró.