Durante la época de verano, las várices y úlceras venosas suelen empeorar por acción del calor, por eso te contamos todo lo que tenes que saber para evitarlas y combatirlas.
Tanto las várices como las úlceras son enfermedades de las venas, siendo las últimas las más avanzadas y peligrosas, ya que pueden comprometer el tejido de los músculos y hasta el hueso.
Este tipo de problema en las venas suele darse con más frecuencia en las mujeres, pero pueden presentarse también en los hombres y de no ser tratadas, las várices, pueden convertirse en úlceras. Por suerte existen formas de combatirlas.
Este es el motivo por el cual se te hinchan las venas de las manos
Por lo general se realizan curaciones oclusivas con un vendaje elástico, pero también pueden realizarse intervenciones quirúrgicas si el paciente lo necesita. En el caso de las úlceras, los tratamientos pueden llegar a ser largos y lentos, dependiendo de la gravedad de la misma, por eso, los profesionales recomiendan mantener la piel que rodea la herida limpia y seca, pero bien hidratada.
El verano suele agravar este tipo de enfermedad venosa debido al calor, que provoca que las venas se expandan y se hinchen sobretodo con temperaturas extremas.
Por eso los especialistas realizaron una serie de recomendaciones para las personas que sufren de este problema sobretodo en los días de calor.
1- Usar ropa holgada y en el caso de las mujeres evitar los tacos altos.
2- Tomarnos un tiempo para descansar las piernas elevándolas en la cama. Con un ángulo de 15° es suficiente.
3- Evitar estar parados, sentados o inmóviles durante largos periodos de tiempo.
4- Evitar el cigarrillo ya que es malo para los vasos sanguíneos.
5- En el caso de los diabéticos, mantener los niveles de azúcar estrictamente controlados.
6- Hacer actividad física, para mantener activa la circulación.
7- Evitar la sal.
8- No pasarnos de peso.
9- Controlar los nivele de colesterol y la presión arterial.
10- Realizar las curaciones correspondientes, tal cual indicó el médico.
A este último debemos recurrir cuando notemos síntomas como: Enrojecimiento, dolor excesivo, fiebre, sangrado, secreción de pus y olor desagradable.