La Policía arribó a la Bombonera pasadas las 14 de este viernes para realizar un allanamiento en busca de pruebas tras los violentos incidentes que ocurrieron en la pileta del club el pasado martes 4 de febrero. Las fuerzas de seguridad peritaron las cámaras de vigilancia y otros soportes digitales con la intención de esclarecer lo acontecido esta semana en las instalaciones de Boca.
Desde la Fiscalía N° 35, a cargo de impulsar el procedimiento, indicaron que el accionar se lleva a cabo por lo “ocurrido hace unos días en la zona de pileta del club”. El grupo de la Policía Judicial, integrado por alrededor de 10 oficiales, se dirigieron hacia la gerencia de seguridad con intenciones de revisar las filmaciones del último martes con el objetivo de esclarecer el suceso.
La Fiscal sostuvo: “Trascendieron detalles de disturbios que fueron filtrados a los medios de comunicación masiva pero que no coinciden con el parte policial. Si acudieron 14 móviles de la policía al club, entonces los disturbios habrían sido más graves que los que constan en los documentos que nos llegaron”.
Juan Bautista Mahiques, Fiscal General de la Ciudad, explicó que las medidas están emparentadas a la reestructuración del Ministerio: “Para terminar con la violencia en el fútbol necesitamos ir a fondo con las investigaciones”.
El hecho de las piletas enfrentó a varios barras de la facción de La Boca –que tienen como punto de encuentro a Caminito– con Luis Arrieta y uno de sus muchachos de confianza, quienes representan al grupo de Caseros. Cerca de las parrillas, habrían tenido un entredicho por el consumo de marihuana y el volumen de la música que terminó decantando en algo más grave. Los testigos que estaban disfrutando del calor en las instalaciones de la entidad relataron que hubo botellazos y hasta amenazas con un arma blanca. La seguridad del club intervino a toda velocidad y los efectivos de la Comisaría 4ª le pusieron punto final al conflicto.