El sumo pontífice ha restringido su actividad dentro del Vaticano en medio de un brote mundial del coronavirus.
Este sábado, el papa Francisco volvió a suspender parte de su agenda y es el tercer día consecutivo que lo hace por padecer un “leve resfrío” por lo que restringió sus actividades dentro del Vaticano.
De acuerdo a la información brindada por el Vaticano, el pontífice celebró su tradicional misa matutina en la residencia de Casa Santa Marta, donde vive en el Vaticano, y luego recibió a sus embajadores en Francia y en Líbano; al cardenal canadiense Marc Ouellet y al líder religioso ucraniano Sviatoslav Shevchuk.
Sin embargo, pospuso las audiencias previstas “a los miembros del Grupo Internacional de Bioética y a los participantes en el Capítulo General de los Legionarios de Cristo y las Asambleas Generales de los Consagrados y Laicos del Regnum Christi”, explicó el vocero papal Matteo Bruni a Télam.
Por un leve resfrío, Jorge Bergoglio mantiene su agenda a medias desde el jueves, cuando canceló un encuentro con el clero romano fuera del Vaticano. Está previsto que Francisco y unos 50 miembros de la Curia comiencen mañana una semana de ejercicios espirituales en la ciudad de Ariccia, a 30 kilómetros de Roma.