El hecho se produjo el sábado pasado, en Rosario, en la casa que compartía la chica de 14 años con su padre, la actual pareja del hombre, y dos medio hermanos de uno y cinco años.
El hombre, de 33 años, enfureció cuando recibió un mensaje de parte de la madre de la menor, de la cual se encontraba separada, en la que le avisaba que la hija se iba a encontrar con un chico de 15 años en su casa.
El padre de la menor enfureció, tomó su teléfono y descubrió que además de ocultarle la cita lo había bloqueado de la red social Instagram, al igual que al resto de su familia. En medio del ataque de rabia rompió el aparato y sometió a su hija a una feroz golpiza.
Después el hombre se retiró y la chica fue socorrida por su madrastra, quien le pidió que no llore, porque esa situación podía enfurecer aún más a su padre y le facilitó un celular, con el que le mandó, a través de su cuenta de Instagram, una foto de su rostro golpeado a un primo.
Al día siguiente, la menor fue llevada al Hospital de Niños Zona Norte por una tía y la abuela materna y en el centro asistencial le diagnosticaron “un severo traumatismo facial, con fractura de la pared externa del seno maxilar derecho, además de hematomas en el ojo derecho que le comprometió la visión, mascullones en un hombro y en la espalda”.
La abuela realizó la denuncia de la agresión y el padre de la menor se presentó espontáneamente el domingo en la comisaria novena de Rosario, donde quedó detenido.
El hombre fue imputado del delito de “lesiones dolosas graves agravadas por el vínculo” y la jueza Silvia Castelli dictó la prisión preventiva por el plazo de dos años.