Tras un pedido de la defensa, dos de los rugbiers detenidos por el crimen Fernando Báez Sosa ocurrido el 18 de enero en Villa Gesell, recibieron asistencia psiquiátrica.
Según confirmaron fuentes judiciales, el pedido fue por sentirse afectados por las condiciones de alojamiento, que les impiden tener salidas al patio o realizar actividades físicas.
Se trata de Lucas Pertossi (21) y Ayrton Viollaz (20) que fueron asistidos profesionalmente por un médico psiquiatra del Servicio Penitenciario Bonaerense en la Unidad Penitenciaria 6 de Dolores.
Según los investigadores, la intención de los dos detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa era hablar de las condiciones de alojamiento, ya que por el lugar en el cual están encerrados no pueden acceder al patio del penal ni realizar actividades físicas o culturales, y solo tienen una hora por día para poder comunicarse por teléfono con sus familiares y una radio para saber lo que ocurre afuera. Es que, por cuestiones de seguridad, tanto ellos como Máximo Thomsen (20), Ciro Pertossi (19), Blas Cinalli (18), Enzo Comelli (20), Luciano Pertossi (18) y Matías Benicelli (20), están alojados en una celda del sector de la Alcaidía del penal, alejados del resto de la población carcelaria para evitar que puedan sufrir algún tipo de agresión por parte de otros presos.