Edgardo Orellano, padre de Carlos, el joven cuyo cuerpo apareció flotando en el río detrás del boliche Ming donde fue visto por última vez, afirmó que “cayó al agua prácticamente muerto”. También apuntó contra el Instituto Médico Legal (IML) al asegurar que “a la perito de parte la maltrataron”.
“El chico cayó al agua prácticamente muerto. Tenía muchos golpes en la cabeza, en los hombros, sangre en un pulmón y no tenía ni una gota de agua”, consignó esta mañana Edgardo, al tiempo que señaló: “Hay otra hipótesis: no sabemos si cayó al agua desde afuera del boliche o desde adentro. Cuando lo sacaron del boliche ya estaba muerto. Dos metros más acá, o dos metros más allá, da lo mismo”.
En tal sentido, el padre de Carlos deslizó que “supuestamente lo mataron en algún lugar de la confitería, en alguna parte del reservado, esperaron que se vayan todos los chicos a las 5 de la mañana y después lo tiraron al agua”.
A su vez, cuestionó a las autoridades del Instituto Médico Legal, que no habría dejado participar del estudio a la la perito de parte Virginia Creimer. “A la perito de parte la maltrataron, la chicanearon. Es grave todo lo que pasó. No querían que trabaje porque sabían lo que iban a encontrar”, aseguró.
Pese a que ayer le habían confirmado que la perito de parte iba a participar con toma de imágenes en la autopsia, el papá de la víctima sostuvo que “la fiscalía puso trabas hasta último momento porque sabían que se iba a encontrar todo. Hay gente que en todo momento entorpece la causa. Vamos a denunciar al fiscal Spelta para que vaya preso”.