Los precios del petróleo iniciaban la semana en fuerte retroceso con el barril de Brent en su nivel más bajo desde 2002, una nueva caída provocada por el impacto de la pandemia del coronavirus en la demanda.
Hacia las 9.25 GMT, el barril del Mar del Norte para entrega en mayo se vendía a 22,89 dólares en Londres, una caída de 8,18% respecto al cierre del viernes, poco antes de recaer a 22,58 dólares.
En Nueva York, el barril de WTI para mayo perdía 4,88%, a 20,46 dólares, tras haber caído por debajo de la barrera de los 20 dólares.
“Esto refleja simplemente la creciente conciencia de que la demanda de petróleo se está colapsando, probablemente mucho más que el 20% que pronosticamos para abril y mayo”, según los analistas de JBC Energy.
La crisis sanitaria y las drásticas medidas adoptadas para contener la propagación del virus, como limitar el desplazamiento de personas y de mercancías, golpean la demanda de crudo.
Para Hussein Sayed, de FXTM, además del confinamiento, “la ruptura del acuerdo OPEP+ continuará pesando sobre los precios”. Y es que dos de los tres principales productores mundiales, Arabia Saudita y Rusia, protagonizan una guerra de precios desde el fracaso de las negociaciones en el marco del acuerdo entre los miembros de la OPEP y 10 países aliados.