Los jueces de la Corte Suprema buscan evitar la propagación del coronavirus en dependientes y público por igual.
Horas después de que el Gobierno decretara una cuarentena obligatoria hasta el 31 de marzo para frenar el avance del coronavirus, o Covid-19, en el país, los jueces de la Corte Suprema de la Nación dispusieron una feria judicial extraordinaria para evitar la propagación del virus en sus dependientes y el público.
La medida era analizada desde el lunes pasado, pero recién entrará en vigencia ahora que está en funcionamiento la cuarentena decretada por el presidente Alberto Fernández.
Sin embargo se prestará atención a los casos penales vinculados a las personas privadas de su libertad, a los delitos de “violencia urbana y doméstica”, y a quienes atenten contra la salud pública a la luz de lo estipulado en el decreto presidencial: solo se puede salir a la calle por razones de fuerza mayor.
También se atenderán cuestiones vinculadas a delitos migratorios, de la interrupción de comunicaciones, contra las personas, ataques sexuales o contra la seguridad y el orden público.
En la materia no penal, la Corte dispuso que se atenderán casos que involucren el bienestar de los menores de edad o de violencia de género o intrafamiliar.
La suspensión de la actividad en el orden nacional y en la Ciudad de Buenos Aires fue reclamada por el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, y la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación.