La Asociación de Trabajadores de la Sanidad de Rosario y el sur provincial (Atsa Rosario) renovó su preocupación pública por la situación que vive el personal no médico de Grupo Gamma. Es que pese a la cuarentena preventiva y obligatoria que dictó el gobierno nacional hasta el 31 de marzo y que las tareas administrativas han disminuido sustancialmente, se sigue obligando a los trabajadores y trabajadoras de ese sector a que concurran a los sanatorios, institutos y consultorios que pertenecen al grupo, en vez de instalar un sistema de teletrabajo. Además, la empresa se niega a suspender turnos y actividades programadas que no son urgentes. La misma situación fue denunciada por los administrativos del Sanatorio Centro. En el sanatorio Parque (Grupo Oroño) ocurría lo mismo pero desde este miércoles y, a causa de los reclamos del personal y del gremio, modificó su política.
“El Grupo Oroño cambió su actitud. Ha reducido las consultas presenciales y ha dejado un sistema de consulta on line. También redujo el horario del personal administrativo, aunque no sabemos si es suficiente”, dijo el secretario General de Atsa, Marcelo Liparelli.
“Gamma se sigue manejando de la misma manera”, explicó el gremialista a El Ciudadano. “Siguen haciendo consultorio, estudios, todo funciona igual que siempre en el Hospital Privado de Rosario (HPR), en el Instituto Gamma y en los consultorios ambulatorios del grupo”, agregó.
El mayor cuestionamiento que se realiza desde Atsa es que el personal administrativo sigue trabajando igual que siempre pese a que se podría aplicar el teletrabajo. Esto significa cerca de cien trabajadores y trabajadoras entrando y saliendo de espacios por los que puede circular el Covid-19.
“Ni siquiera se han reprogramado estudios o cirugías no esenciales que se pueden realizar más adelante. Esto lo pedimos para cuidar a los trabajadores y a la ciudadanía, para que no haya tráfico de gente innecesaria dentro de las instituciones”, considero Liparelli.
A este reclamo se sumó este jueves el personal del área administrativa del Sanatorio Centro, que puso en conocimiento de Atsa la situación a la que están expuestos ya que la empresa no modificó sus horarios de trabajo ni les brindó la posibilidad de trabajar a distancia.
Liparelli detalló que este jueves se firmó el aumento para todos los trabajadores de la sanidad del sur provincial. Tras la última revisión, se llegó a un incremento salarial de un 53,8% para el período que va de julio de 2019 a junio de 2020. El acuerdo alcanza al personal no médico, enfermeras, mucamas, administrativos y técnicos de sanatorios, clínicas, geriátricos y psiquiátricos privados, entre otros.