Alemania estableció la obligatoriedad del uso del tapabocas en comercios, transporte público y trenes de larga distancia en 15 de sus 16 estados, con multas de entre 25 y 10.000 euros.
En Schleswig-Holstein, el estado aún eximido del maskenpflicht -término teutón para denominar la utilización del barbijo casero-, se implementará a partir de pasado mañana.
Las autoridades no obligan a usar barbijos, sino que permiten el uso de pañuelos, bufandas o cualquier adminículo que cubra boca y nariz, lo que fue cuestionado por varios especialistas.
Los expertos señalaron que el uso indebido o una mala protección podría dar la falsa sensación de seguridad y advirtieron sobre un posible repunte de coronavirus en el país, que hasta el momento contabiliza 158.142 infectados y 5.985 muertos, según datos de la Universidad estadounidense Johns Hopkins, aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) reportó 154.175 afectados y 5.640 decesos.
Dado que cada uno de los estados alemanes son los que determinan las medidas y los modos de llevarlas a cabo, las multas y sanciones económicas también varían según los territorios del país.
En Berlín o Brandeburgo, por ejemplo, no habrá sanción económica, sino que se apeló a la responsabilidad personal.
Las multas más duras serán para los comercios cuyo personal sea sorprendido sin tapabocas, mientras que en la mayoría de estados se fija una tabla que va incrementando la cuantía de la multa en función del número de infracciones.