Son varias las provincias y distritos que están implementando curiosas metodologías para detectar posibles casos de coronavirus o bien, intentar frenar la pandemia. Luego del “túnel de desinfección” que activó Tucumán, ahora la ciudad bonaerense de Chacabuco puso en marcha un “control de olfato”, en sus accesos para detectar casos positivos, ya que uno de los síntomas de esa enfermedad es la pérdida de ese sentido.
Se trata de un cartón con una fragancia que los automovilistas deben oler e identificar para certificar que tienen olfato.
“A los controles en los accesos, de identificación de chapa patente, datos de conductor y acompañantes y control de temperatura, le hemos agregado desde hoy la prueba del olfato ya que está demostrado científicamente que entre un 30 y un 66% de las personas que son asintomáticas y poseen coronavirus positivo pierden el olfato“, explicó el intendente del distrito y médico pediatra, Víctor Aiola.
Además, el jefe comunal detalló que el dispositivo que cuenta con “distintas sustancias no alergénicas” consta de “un cartoncito impregnado que se le hace oler y en el caso que no huela la sustancia, se detecta la falta de olfato y se activa un protocolo”. El automovilista sin olfato será sometido a un hisopado para determinar si tiene o no coronavirus.
El automovilista sin olfato es sometido a un hisopado
En el distrito de Chacabuco, de 55 mil habitantes, rige desde hace días una restricción de circulación vehicular según sea patente par o impar, la obligatoriedad de usar barbijo o tapaboca,y a partir de hoy se suma el control olfativo.
Por último, Aiola insistió en que se debe salir sólo si es necesario, “el virus está circulando y está esperando la oportunidad para infectar”.
El control olfativo se puso en marcha en los dos ingresos principales: Elguea-Román, donde está permitido circular las 24 horas y el acceso por Hipólito Yrigoyen, por donde se circula de 8 a 18 horas.