El mandatario de una provincia del noroeste argentino contrató los servicios del exvicepresidente de la Nación. Los detalles.
El gobernador de La Rioja , Ricardo Quintela, anunció que la Provincia pagará la deuda de los empleados provinciales con empresas financieras: el Banco de La Rioja se hará cargo de esos montos y les cobrará un interés anual del 10%. ¿Quién lo asesoró en la medida? El exvicepresidente y exministro de Economía Amado Boudou , quien desde hace unas semanas cumple prisión domiciliaria -está condenado y cumpliendo su sentencia a 5 años y 10 meses de prisión- después de una controvertida decisión por el Covid-19 .
Quintela reveló su decisión de convertir a Boudou en su asesor en una entrevista concedida a Somos Radio AM 530 de Buenos Aires. Precisó que había mantenido una videoconferencia con el excompañero de fórmula de Cristina Kirchner y oficializó que es su consultor en materia económica.
La prisión domiciliaria de Boudou será revisada por los jueces de la Sala IV de Casación, Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Javier Carbajo. Está condenado por haber intentado quedarse con el 75% de las acciones de la imprenta Ciccone ; la pena es por los delitos de cohecho pasivo y negociaciones incompatibles con la función pública.
Quintela explicó que los empleados estatales riojanos tienen comprometido parte de sus salarios por los créditos tomados en empresas como “Garbarino, Musimundo, Centro Card, Tarjeta Naranja, entre otras” y que, aunque no debería pasar el 40% de lo que cobran, en la realidad supera esa cifra.
“Con las utilidades que tiene la Provincia, queremos comprar las deudas que tienen los trabajadores”, agregó. Después de comprados esos montos, el Banco Rioja les dará un crédito al 10%. La deuda global sumaría unos $6000 millones, según estima el sitio local German La Rioja que accedió a un estudio privado sobre el tema. Cada trabajador público tendría una deuda promedio de $100.000.